Dejar de aplazar.
En un territorio
cualquiera cohabitan diferentes fuerzas, que lucharan para mantenerse y traerán
crisis a ese escenario. Hoy quiero compartirles sobre cuando el territorio
somos nosotros, nuestro cuerpo y mente. Cuando dejamos por fuera lo espiritual
y cuando no asumimos la vida como el espacio de tiempo en el que habitamos.
Es necesario gestionar
sanamente nuestros recursos emocionales. Distinguir lo que pasa de la actitud
que asumimos frente a lo que nos pasa. Celebrar la vida y cambiar la actitud es
absolutamente necesario para cambiar nuestra visión.
Tanto la agresividad
como la pasividad tienen su efecto, sus consecuencias en nuestra forma de
vivir. Elegir y capacitarnos en la asertividad, nos permitirá dejar un legado
amoroso.
Hoy más que nunca les
invito a mirar más allá de lo que tienes cerca y posees. Abandona la comodidad
y la inamovilidad, actúa y avanza. Basta de excusas, lo único que consigues con
eso es sostener las razones de tu infelicidad.
El gran pintor Renoir
padecía de artritis y en su vejez, cada pincelada era muy dolorosa, por lo cual
su amigo Matisse le pregunto que por qué seguía haciéndolo, a lo cual le
respondió: es que el dolor pasa y la belleza queda. Agradezco a Renoir su
actitud, me parece enriquecedora como lección. Primero es consciente de su
dolor y de su talento. Segundo, decidió usar los dos, el dolor y el talento. No
se quedó quejándose de su condición, si no que aprovecho la situación y hoy
podemos disfrutar su legado.
Establecer objetivos
es maravilloso, lo divertido es cumplirlos; y digo divertido porque es una
aventura salir de nuestra zona de confort para ir a alcanzar lo que solo está
en nuestro corazón. Creo que si estás leyendo este artículo es porque estas en
la etapa de tu vida donde quieres más y ha llegado la hora de implementar un
plan de acción para desarrollar la creatividad, crear coherencia entre lo que
piensas y sientes con lo que haces, si no, no es más que papel que se deshace
con las primeras lagrimas del fracaso y la derrota.
Queridos lectores
llego el tiempo de transformar tus sueños en metas, es decir, colocarles fecha
y así obtendrás tu realidad, con tus esfuerzos, triunfos, errores y con el
maravilloso sabor del logro trabajado por ti.
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