ESO QUE TU QUIERES: NO EXISTE
En el último mes he atendido a personas que me han hecho preguntas que globalizan una respuesta “Eso que tu quieres: NO EXISTE”; y es que tal parece que estamos esperando que sucedan o no algunas situaciones para así, gracias a ese evento, no actuar ni ser responsable de los resultados.
Algunas de estas preguntas han sido:
1. Existe alguna pastilla que me borre todos los recuerdos que tengo de mi novio de 7 años?
2. Como hago para decirle a mi esposa que estoy enamorado de su mejor amiga y que ella no haga un escándalo?
3. Quiero irme con el mejor amigo de mi esposo pero como hago para que él no lo tome mal?
4. Que forma hay para irme de la casa y que mis hijos no se vean afectados?
5. Mi esposa está embarazada de mi mejor amigo, como hago para que mi familia no se entere de que ella fue capaz de traicionarme con mi mejor amigo?
6. Mi familia cree que el próximo año me gradúo, la cosa es que yo abandone la universidad hace 3 años, que puedo decirles para que no se molesten conmigo, cuando les cuente la verdad.
7. Tengo mucha rabia porque le encontré unos mensajes de una mujer a mi esposo en el teléfono, averigüe y si ha salido con ella un par de veces; el asunto es porque el bruto no los borro para que yo no me enterara? Como yo que si borro los mensajes que me manda mi amigo con derecho, desde hace 10 años?
La respuesta que le di a todas estas preguntas fue la misma:
ESO QUE TU QUIERES: NO EXISTE.
Lo que me impacta de todas estas personas que me hicieron las respectivas preguntas es el hecho de creer que:
A. Sus familiares no van afectarse por lo que han hecho, o por lo que han permitido.
B. La edad de ellos, varía entre 27 y 44 años. No son adolescentes.
C. La seriedad con que han hecho las preguntas.
D. Que hayan decidido ir a consulta para recibir una respuesta mágica a la solución de sus problemas, y no para resolver sus propios conflictos.
E. Que crean que los demás no sospechan o sientan que algo no va bien.
F. La cara que han puesto cuando les digo ESO QUE TU QUIERES: NO EXISTE
Estas personas con sus preguntas y sus circunstancias han puesto a prueba mi capacidad de asombro, me han retado y ubicado, no permitiendo que se me olvide que soy una facilitadora, que debe acercarse con respeto y sin juicio al proceso de sus clientes.
Me impresiona también que los familiares de todas estas personas, no hayan intervenido de alguna forma en lo que estaba pasando; y si la respuesta es que los familiares no se dieron cuenta, pues entonces la situación es más grave porque no solo estas personas están pasando por situaciones extremas, sino que no tienen una red de apoyo que les brinde contención. Y si la respuesta es que los familiares SI se dieron cuenta de lo que estaba pasando, y fue que decidieron no meterse en el asunto, pues es lamentable que la familia este perdiendo uno de sus roles: darle a sus miembros seguridad afectiva.
Un punto en el que quiero enfatizar, es la calidad de consejos que le dieron las primeras personas a quienes ellos les preguntaron. Consejos que van desde compra el titulo, celebra la fiesta en algún restaurant y alquilas toga y birrete; hasta vete del país y regresa dentro de un año.
Recientemente, oí a una mujer periodista referirse a una viuda con estas palabras: allí la tienen se murió su esposo y está haciendo hallacas y vendiéndolas, bajo la presunción de pobrecita. A esta periodista le tengo una respuesta, un par de preguntas y un criterio personal.
La respuesta: ESO QUE TU QUIERES: NO EXISTE. No es sano esperar que otros resuelvan por nosotros, yo felicito a esta viuda por trabajar y no quedarse sentada esperando una solución externa a su manutención.
Las preguntas: ¿Es que hay algo malo en trabajar haciendo y vendiendo hallacas?, ¿Es que no está enterada que el trabajo dignifica, y que aquello de que el trabajo lo hizo Dios como castigo es solo una canción?.
El criterio personal: la mejor ayuda que necesita esta viuda es ánimo y apoyo para que continúe su caminar y lo que no necesita es que la victimicemos: allí está haciendo y vendiendo. Ella está haciendo lo propio: trabajar para encargarse de ella y no esperar que otros vengan a compadecerse.
Realmente lo que me inspiro a escribir estas líneas fue el pensamiento mágico de estas personas, al creer que sus actos no traerían consecuencias, el creer que pueden llevar una vida paralela y no ser descubierto/a, pensar que pueden involucrarse con alguien y no quedar atrapado/a en esa relación. Todo esto se resume en creer que PUEDO HACER TODO LO QUE ME PROVOQUE.
Somos humanos, nuestros actos tienen consecuencia, lo que sembramos eso cosechamos, seamos tan solidarios que podamos con profundo amor y respeto alertar a aquellos que amamos y decirles:
ESO QUE TU QUIERES: NO EXISTE.
Mayela Carrillo Blanco de Gaerste.
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