Respetar significa ver como adecuado, ver a ello tal y como es, sin añadir y sin querer cambiar. Cuando digo que hoy decido respetarte, estoy proclamando que abandono mis luchas internas por transformarte en lo que no eres y que acepto tus diferencias con respecto a mí, a lo que soñé, a lo que espere. Y también estoy anunciando mi decisión de si puedo vivir con tus maneras y las mías o si sencillamente es necesaria la cortesía para expandirme y distanciarme. Cada vez más, encuentro gente tan normal como tú y como yo que desean ser felices y en compañía pero que yerran al querer torcer el carácter propio y de extraños. Cuando comenzamos una relación de cualquier tipo es necesario el respeto y el establecimiento sano de límites, estos dos no son opuestos, todo lo contrario, el respeto me permite valorarte y los limites valorarme. Considerar que toda relación tiene un proceso es un acto de madurez y de integración. Así que requiere que cada cierto tiempo y al sentir presión l...